27 nov 2024
El sector del desarrollo web y la programación es uno de los más importantes de la actualidad, ya que gracias al trabajo de los desarrolladores, hoy en día contamos con programas y aplicaciones que utilizamos en el día a día.
Por supuesto, el ámbito del desarrollo ha evolucionado con el paso del tiempo, a medida que ha avanzado también la tecnología.
Justo ahora, existen diversas formas de programar y cada una de ellas ofrece ventajas específicas para los trabajadores de este sector.
Es allí donde se encuentra la programación funcional, una forma distinta de desarrollar programas y aplicaciones móviles.
Así que, si te interesa adentrarte en este mundo y conocer más sobre la programación funcional, nosotros te explicaremos todo lo que necesitas saber.
¿Qué es la programación funcional?
Cuando se habla de la programación funcional se hace referencia a un tipo de desarrollo web en que las funciones son el punto más fuerte de todo el trabajo.
Para comprender de qué se trata y porqué se presenta como una alternativa novedosa para programar, hay que entender en qué se diferencia de otros tipos de desarrollo.
Por ejemplo, se puede diferenciar de manera clara con respecto a la programación orientada a objetos, porque mientras esta se centra en el uso de clases y objetos, en la programación funcional se organiza el código en forma de funciones.
Cada una de estas funciones pueden entrar y producir salidas sin ningún tipo de cambio en el estado del programa, cosa que es de gran ayuda para no tener que lidiar con efectos secundarios.
Es por esto que la programación funcional se encuentra fundamentada en principios matemáticos para hacer que los códigos sean mucho más fáciles de entender.
Por lo tanto, las funciones son bloques de código que facilitan el trabajo en aplicaciones que necesitaban de un desarrollo más complejo.
Características de la programación funcional
Ahora bien, para comprender mejor las capacidades y modo de funcionamiento de este tipo de programación, es fundamental conocer sus características definitorias.
Por ese motivo, te presentamos un listado completo con ellas:
Funciones puras
Al programar con esta metodología te encontrarás con funciones puras que no son más que aquellas que producen un mismo resultado a partir de un conjunto de entradas específicas.
Por lo tanto, son utilizadas para crear parámetros bien definidos a partir de valores específicos, en vez de utilizar variables globales.
De esa manera, se evita la aparición de efectos colaterales que pudiesen afectar el funcionamiento de la aplicación.
Funciones de orden superior
Dentro de la programación funcional también te encontrarás con las funciones de orden superior, que en este caso tienen la capacidad de devolver una función como resultado o recibirla como un argumento.
Resulta recomendable trabajar con este tipo de funciones cuando se necesita diseñar aplicaciones que sean modulares o trabajar con códigos que puedan ser reutilizables.
Inmutabilidad
Otra gran característica a destacar es que los datos dentro de este tipo de programación son inmutables. Esto quiere decir que no hay posibilidad de que cambien una vez que han sido diseñados.
Por lo tanto, cuando se necesita cambiar algo, es necesario crear nuevos valores, en vez de modificar aquellos que ya fueron creados.
Gracias a esto, es posible reducir la aparición de errores de cara al futuro y prevenir los problemas de estado compartido.
Transparencia referencial
Por otro lado, hay que destacar que dentro de esta programación se trabaja con una expresión que es transparente en forma referencial.
Esto quiere decir que su valor puede ser reemplazado cada vez que sea necesario y no va a alterar para nada el comportamiento general del programa.
De esa manera, al trabajar con la programación funcional, es posible depurar y mejorar el razonamiento del código de manera rápida y sencilla.
Evaluación perezosa
Por último, hay que destacar que también se puede utilizar la técnica de la evaluación perezosa a medida que trabajas.
Se trata de una estrategia en la que las expresiones no serán evaluadas hasta que los resultados de las mismas sean necesarios o solicitados por el programador.
Esto es algo que permite ahorrar tiempo, porque no se tendrán que realizar cálculos innecesarios y optimizar el rendimiento general a la hora de programar.
¿Cuáles son los lenguajes de programación funcional más utilizados?
Otro aspecto a tener en consideración es que para programar de modo funcional puedes recurrir a diversos de lenguajes de programación.
Incluso, algunos han sido diseñados de forma específica para ser utilizados en la programación funcional.
Así que, algunos de los más comunes con los que podrás trabajar al comenzar a programar de esta manera son:
Lisp: este es uno de los lenguajes que se ha utilizado por más tiempo al trabajar con la programación funcional y ha evolucionado con el paso de los años para mantenerse vigente de cara a los nuevos proyectos de desarrollo.
Haskell: se trata de uno de los más conocidos, ya que posee una gran biblioteca de herramientas para trabajar y una comunidad activa a nivel mundial.
Erlang: aunque fue creado de forma original para el sector de la telecomunicación, Erlang puede ser utilizado para manejar sistemas distribuidos.
Scala: es una alternativa que puede utilizarse tanto en la programación funcional, como en la programación orientada a objetos, gracias a su increíble flexibilidad.
F#: este es un lenguaje que permite combinar la programación imperativa con la funcional, para así implementar las funciones en las aplicaciones .NET y los softwares de entornos empresariales.
Pros y contras de la programación funcional
Antes de comenzar a trabajar con la programación funcional como opción principal, hay que tener en cuenta qué tipo de ventajas y desventajas presenta.
Recuerda que hoy en día existen muchos estilos de programación a los que se pueden recurrir y cada uno de ellos posee características específicas.
Por lo tanto, si has decidido tomar en consideración la programación funcional como tu opción principal, tienes que evaluar sus pros y contras antes de elegirla de manera definitiva:
Pros
Iniciemos por enlistar los puntos positivos que ofrece la programación funcional para entender los motivos por los que es una opción tan elegida en la actualidad:
Disminuye el riesgo de errores
En vista de que al trabajar con la programación funcional no se generan efectos secundarios, es posible reducir el nivel de riesgos de errores mientras desarrollas tu programa o aplicación.
Sin duda, esto es de gran ayuda para aquellos sistemas que son más complejos y en los que se vuelve necesario disponer de varias funciones que puedan ejecutarse a la vez.
Además, ante una menor posibilidad de errores, podrás evitar tener que gastar más tiempo de tu día en darle solución a las fallas que puedan presentarse.
Modularidad y reutilización
Sin duda, su característica de modularidad y reutilización es un gran punto a favor, porque facilita el trabajo de los programadores en muchos sentidos.
Al trabajar con códigos en módulos independientes que pueden ser reutilizados en contextos variados, es posible ahorrar una gran cantidad de tiempo y esfuerzo.
Cosa que, en el largo plazo, permitirá aumentar el nivel de productividad de los programadores independientes y los equipos de desarrolladores.
Código más sencillo
Cuando se tiene un código que es más sencillo, resulta más fácil trabajar con él y también será más simple mantenerlo en el largo plazo.
Los códigos en la programación funcional son muchos más predecibles, ya que cada una de sus funciones tiene un comportamiento consistente.
Gracias a esto, los procesos de depuración y mantenimiento son mucho más sencillos para los desarrolladores.
Gran escalabilidad
A través de la programación funcional, se pueden desarrollar programas y aplicaciones con un alto nivel de escalabilidad, lo que es de gran ayuda cuando se busca crear bases de datos o entornos digitales empresariales.
En general, la escalabilidad siempre es un gran beneficio cuando está presente en cualquier tipo de programación y en este caso lo está, así que es una gran ventaja.
Asimismo, es un punto que te ayudará a mejorar el paralelismo y la concurrencia a medida que desarrollamos los programas.
Mejor rendimiento de los programas
Desarrollar con la programación funcional como tu opción principal te permitirá trabajar desde un entorno de desarrollo que posee un mejor rendimiento en general.
Por ejemplo, al utilizar la evaluación perezosa, podrás optimizar los recursos utilizados, lo que hará que todo funcione de forma más rápida.
Contras
Por supuesto, no todo es positivo, también hay algunos puntos negativos a tomar en consideración antes de comenzar a trabajar con la programación funcional, tales como:
Curva de aprendizaje
Lo primero que hay que destacar es que la curva de aprendizaje de la programación funcional puede ser bastante alta para la mayoría de los desarrolladores, incluso si tienen años de experiencia.
En vista de que están acostumbrados a otro tipo de metodología de trabajo, encontrarse con un entorno que funciona de manera distinta, sin duda les sorprenderá.
Por supuesto, todo es cuestión de estudiar y aprender a fondo cómo programar de esta manera antes de comenzar a desarrollar.
Limitación en cuanto a lenguajes de programación
Otro de los puntos en contra más destacados es su limitación al respecto de la cantidad de lenguajes de programación que pueden funcionar bajo esta metodología.
A pesar de que hay algunos que pueden soportar este tipo de programación, no lo hacen de una forma natural.
Por lo tanto, para poder utilizarlos tendrías que implementar funciones especiales que podrían acabar por generar un código menos eficiente.
Poco intuitivo bajo ciertos contextos
Según el tipo de programa o aplicación que vayas a desarrollar, es posible que te encuentres ante un contexto poco intuitivo, a diferencia de otras formas de desarrollar que suelen ser más simples.
Un claro ejemplo de esto es cuando tienes que crear un programa más complejo, como es el caso de las aplicaciones interactivas o los juegos para móviles.
Esto se debe a que son proyectos en los que tendrás que realizar muchas mutaciones de estado y todo esto en tiempo real para que funcione de forma adecuada.
Pocas herramientas disponibles para trabajar
Para finalizar, tienes que tener en cuenta que, aunque la programación funciona ha ganado popularidad durante los últimos años, todavía no es la opción más utilizada de todas.
Por ese motivo, puede que te resulte un poco complicado encontrar herramientas y plataformas desde las que puedas trabajar.
De momento, la mayoría de los entornos de desarrollo se encuentran centrados en la programación orientada a objetos.
En conclusión
Sin duda, la programación funcional se presenta como una nueva forma de programar muy llamativa con la que podrás disfrutar de una alternativa de desarrollo mucho más eficiente.
Gracias a todas las características que posee y la gran variedad de beneficios que ofrece, se ha convertido en una increíble opción para algunos proyectos de desarrollo.
Así que, si quieres disfrutar de todas sus posibilidades, no dudes en comenzar a programar de esta manera.